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diciembre 2021

Bucear en el Mar Austral

Aguas cristalinas y una fauna submarina variada y cautivante conviertieron a estos tres destinos en los preferidos de los aficionados al buceo. Destinos para sumergirse en los misterios del mar patagónico.

Chubut subacuática

Puerto Madryn, la Capital del buceo

Madryn no sólo es un lugar privilegiado para ver de cerca a las bellenas francas. Con excursiones de buceo diurno y nocturno, una amplia variedad de cursos con certificaciones internacionales y parques submarinos, en 2018, la Cámara de Diputados de la Nación declaró a la ciudad como “Capital Nacional del Buceo y las Actividades Subacuáticas”. En un golfo de aguas cristalinas, el Golfo San Matías, sin corrientes, con poco oleaje y una gran diversidad de vida marina, ofrece excursiones en arrecifes naturales y artificiales de aguas frías, naufragios históricos y modernos, y actividades de aguas profundas y someras, que van de los 4 a los 35 metros.

Nadar con lobos marinos

Una experiencia mágica para unos pocos elegidos. Luego de 25 minutos de navegación por las costas cercanas a la ciudad se accede al área protegida Punta Loma. El recorrido permite ver los acantilados, a los mamíferos marinos que habitan el golfo y otras aves de la zona. Pero los protagonistas son ellos, los lobos que sorprenden acercándose a la embarcación, expectantes, buscando descubrir quién será el primero que ingrese al agua a jugar con ellos. Ya que no hay depredadores naturales en la zona y los lobos son parte de una colonia permanente, suelen interactuar amistosamente con el vistante. La permanencia en el agua es de aproximadamente 45 minutos y se hace con cupos limitados diarios para no perturbar la rutina de los animales.

Una escuela a cielo abierto

Tanto quienes no tienen experiencia previa (ni siquiera es necesario saber nadar) como los buceadores expertos, todos encuentran en Madryn un curso a medida. Para principiantes, la propuesta es hacer el bautismo submarino, snorkeling con lobos y buceo de poca profundidad. Pero para los buzos deportivos que desean mejorar su perfomance, existen propuestas desde el primer nivel deportivo (Open Water Diver) hasta Instructor de buceo, con especialidades como buceo profundo, nocturno, de orientación, búsqueda y recuperación de objetos, foto y video submarino, etc. También se brindan certificados internacionales.

Río Negro: Parque Submarino de Las Grutas

Playas agrestes y aguas cristalinas

En la provincia de Río Negro se encuentra uno de los mejores destinos de playa de Argentina. Con grutas imponentes, mar turquesa y playas paradisíacas cubiertas en conchillas, el paisaje de Las Grutas siempre recibe al turista con un mar cristalino y calmo. Sin embargo, el verano es la época de afloración de las algas y de la reproducción y cría de diferentes especies. Por eso, hay un espectáculo extra para quien quiera sumergirse en sus aguas. Dependiendo de la época del año, también se pueden ver lobos de mar, delfines de lomo gris, toninas, orcas o a la reina de Patagonia: la ballena franca austral.

Los mejores deportes

Peces, moluscos, crustáceos, algas marinas, sargos, meros, salmones, cocheritos, pez aguja, cangrejo ermitaño, vieras, mejillones, cholgas, almejas, ostras, pulpos, cangrejos, estrellas y caballitos de mar son parte de la vida submarina de los arrecifes naturales de la zona. El área de Saco Viejo es la más buscada. Y en las solitarias playas solitarias de Orengo y La Trucha, se pueden ver las restingas mas espectaculares.

Para principiantes y expertos

La vida acuática del golfo cuenta con un espacio privilegiado para la práctica del buceo: el Parque Submarino Las Grutas. Su historia comenzó en 2007 con el hundimiento del Don Félix, que creó un arrecife artificial en el Golfo San Matías. Actualmente existen cinco embarcaciones en el fondo del mar, algo que lo convierte en el parque más grande de Sudamérica. El lugar es apto para buzos de diferentes niveles, tanto principiantes como expertos. Es común encontrarse con cardúmenes de sargos y besugos. Otras especies que se observan son salmones, pez limón, erizos, pulpos, cangrejos, estrellas de mar, delfines, toninas.

Navegación a Isla Mejillón

Ubicada a la altura de El Buque, una de las playas que se extienden hacia el sur de Las Grutas, pasando Piedras Coloradas, es una formación rocosa que integra la restinga, esa superficie de piedra que conforma el lecho marino, y que permanece cubierta durante la pleamar. Sin embargo, en bajamar es posible conocer tesoros como estrellas de mar, erizos, pulpitos y pequeños peces. Es una zona ideal para el Buceo en apnea (con snorkel) cuando sube la marea, ya que hay una gran variedad de fauna submarina. Se accede en una excursión de navegación en la que, algunas veces, es posible ver lobos marinos de uno y dos pelos, delfines o pingüinos. Es una buena opción para ir con chicos.

Desde Ushuaia, el fin del mundo

Aventuras bajo la superficie: el Canal Beagle

El Canal Beagle esconde, bajo la superficie, a la reina del mar, la centolla fueguina, impactantes bosques de macroalgas, medusas, un universo de coloridas criaturas minúsuclas y relatos fantasmales de naufragios. El buceo en aguas australes es un excelente plan para quienes quieren vivir Ushuaia desde la aventura. Con el equipamiento adecuado (trajes secos especiales para baja temperatura), es una actividad disponible todo el año, pero en verano la demanda crece ya que la temperatura del agua oscila entre 8 y 10°C.

El bautismo subacuático

Los principiantes realizan sus primeras experiencias cerca de la costa, donde pueden ver los bosques de algas, cangrejos, estrellas de mar y las famosas centollas. La bahía Ensenada, dentro del Parque Nacional Tierra del Fuego es el lugar tradicional para hacer las primeras inmersiones ya que tiene aguas calmas y es accesible desde la playa.

Perfecto para probar el traje. El lugar tiene una hermosa vista del Canal Beagle, con la Isla Redonda al frente y la Isla Hoste del lado Chileno. Otra zona de bautismos submarinos es a solo 20 minutos de navegación al sur de la ciudad. Las Islas Bridges: cuatro islas que forman un puerto natural que repara la zona del viento.

Relatos fantasmales

Ushuaia también es tierra de leyendas. Tormentas, fuertes vientos y corrientes han convertido al lecho del mar en una zona llena de restos de barcos. Sumergirse conocer sus historias de naufragios. Para buzos con experiencia y capacidad de enfrentar condiciones adversas, es una experiencia que deja huella. En la zona oriental del Canal de Beagle se encuentra el antiguo vapor Sarmiento con su casco tapizado con esponjas, ascidias y algas. Está hundido parcialmente y se puede llegar desde la playa. Permite ingresar a algunos compartimientos.

El monte Cervantes, un crucero de 160 m de eslora que naufragó en 1930 cerca del faro Les Eclaireurs, es la gran estrella del Canal. Parte de la nave está inaccesible al buceo deportivo. Las ruinas cercanas son visitadas solo por buzos expertos, ya que las corrientes y vientos pueden ser fuertes y no hay reparos naturales cercanos.

La magia de la noche y el buceo en túneles

A 20 minutos de navegación desde Bahía Ensenada se accede al área protegida de Puerto Cucharita, donde es posible practicar el buceo en túneles hasta 35 metros de profundidad. Es una pared escalonada, con mesetas tapizadas por el bosque de algas.

Iturrieta, también conocida como isla Hache, porque son dos islas unidas por un pequeño istmo, es el lugar privilegiado del buceo nocturno. Se realiza en una pared cubierta de algas con dos grandes entradas en las que el bosque es más tupido. La profundidad es de 18 metros, aproximadamente.

Otras opciones para explorar el fondo del Beagle son las salidas a la estancia Túnel, Isla de los Lobos cerca del faro Les Eclaireurs, islas Bridges, Isla Redonda e Isla Estorbo.

Sumate al PreViaje

Para viajar por todo el país, se puede acceder al programa de beneficios PreViaje, que otorga un reintegro del 50% de los gastos de la compra de servicios con anticipación. Si pensás viajar a partir de febrero 2022, serán válidos aquellos comprobantes emitidos entre el 12 de agosto y el 31 de diciembre de 2021, y pueden ser cargados hasta el 31 de diciembre.

Para conocer los prestadores adheridos y cómo cargar los comprobantes podés ingresar a previaje.gob.ar.

Fuente: Cómo es bucear en el Mar Austral – LA NACION

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El Gobierno argentino acuerda con las provincias una subida de impuestos

El Gobierno de Alberto Fernández ha firmado este lunes con las provincias argentinas un acuerdo fiscal que permite la creación de nuevos impuestos. El pacto es un balón de oxígeno para regiones necesitadas de fondos extra, encorsetadas desde que el último acuerdo, firmado en 2017 por el expresidente Mauricio Macri, los impelía a reducir la carga fiscal sobre empresas y particulares. La foto de Fernández en la Casa Rosada con los 23 gobernadores del país, oficialistas y opositores, fue también un mensaje al Fondo Monetario Internacional (FMI). Argentina negocia en estos momentos un nuevo calendario de pagos con el multilateral y necesitaba enviar a Washington una imagen de unidad.

“Este acuerdo nos sirve mucho en la discusión que tenemos con el Fondo porque nos muestra un país que proyecta el futuro en términos fiscales racionales y con el consenso de todos los gobiernos provinciales”, dijo Fernández en el momento de la firma. Ha sido un gesto político, pero también una necesidad ante la escasez. Hace dos semanas, la oposición vetó en el Congreso la ley de Presupuesto 2022 redactada por el Ejecutivo. Fue un baldazo de agua helada que nadie esperaba. A un mismo tiempo, el Gobierno se quedó a sin cartas para mostrar a los negociadores del FMI y las provincias sin los fondos nacionales que la norma destinaba a obras de infraestructura en sus territorios.

Los gobernadores podrán ahora compensar ese faltante, de 1,2 billones de pesos (11.000 millones de dólares) con un nuevo impuesto a la herencia, que en Argentina solo se paga en la provincia de Buenos Aires, y una subida en la alícuota de ingresos brutos. El pacto ata además el gasto al crecimiento del PBI, en lugar de la inflación, como se había acordado en 2017, durante el Gobierno de Macri.

Los gobernadores de la oposición ya adelantaron que no subirán impuestos, pero aceptaron firmar el acuerdo porque la letra habilita pero no obliga. Solo faltó el jefe de Gobierno de Buenos Aires, el líder opositor Horacio Rodríguez Larreta, enfrentado con la Casa Rosada en los tribunales por la decisión de Fernández de retirarle los fondos que había recibido durante el Gobierno de Macri para financiar el traspaso de la policía. “Quieren obligarnos a todos los argentinos que vivimos en la ciudad a renunciar al derecho de reclamar los fondos que nos quitaron inconstitucionalmente”, dijo Rodríguez Larreta.

Una subida de impuestos siempre es un tema delicado. La Unión Industrial Argentina (UIA) sostuvo en un duro comunicado que el nuevo acuerdo fiscal “genera enorme preocupación debido a que incrementa la presión tributaria en el sector productivo al eliminar la reducción progresiva de ingresos brutos establecida originalmente en el año 2017″. Ese pacto se había pensado como una forma de ajustar el gasto en las provincias a cambio de dinero llegado desde el Gobierno central. Pero la recesión económica, la inflación y la subida del déficit primario (antes del pago de intereses de la deuda externa) dinamitaron la posibilidad de reducir los ingresos fiscales. El Gobierno llevará ahora el pacto ante el FMI. Sin ley de Presupuesto, podrá al menos exhibir un documento que habla de un consenso con los líderes territoriales de la oposición.

Federico Rivas Molina (publicado en El País el 27/12/2021)

Fuente: Consenso fiscal: El Gobierno argentino acuerda con las provincias una subida de impuestos | Internacional | EL PAÍS (elpais.com)

Muere Hugo, el hermano menor de Diego Armando Maradona

El exfutbolista Hugo Maradona, hermano menor de Diego Armando Maradona, ha muerto tras sufrir un ataque cardíaco en su residencia de Monte de Procida, en la provincia de Nápoles, al sur de Italia, donde la estrella argentina sigue siendo un ídolo popular, según informan medios locales.

El menor de los Maradona, de 52 años, ha fallecido esta madrugada en su casa, donde acudieron con rapidez los servicios de emergencia de Pozzuoli, aunque solo pudieron confirmar su muerte, según las fuentes, que aseguran que Maradona tenía previsto someterse a exámenes cardíacos en breve.

La muerte de Hugo, que vivía en Italia desde hace tiempo, se produce poco más de un año después del fallecimiento de Diego, el 25 de noviembre de 2020, cuya desaparición conmocionó al mundo del fútbol y en particular a los aficionados napolitanos, que idolatraban al jugador argentino.

El menor de los Maradona, que comenzó a jugar muy joven al igual que sus hermanos Diego y Lalo, no tuvo una carrera larga en Italia. Aunque firmó muy joven para jugar en el Nápoles y fue cedido a un equipo de la máxima categoría (el Ascoli) no logró despuntar.

Formado en el Argentinos Junior, Hugo militó en numerosos equipos de distintos países, como el Rapid de Viena austriaco, el Rayo Vallecano español, el Deportivo Italia venezolano y el Avispa Fukuoka, entre otros clubes japoneses. También jugó en Uruguay y Canadá antes de dedicarse a las categorías inferiores del Nápoles.

Hace solo unos meses, el hermano menor de Maradona había anunciado su intención de presentarse a las elecciones municipales de Nápoles sur como cabeza de la lista Napoli central de Enzo Rivellini, que formaba parte de la coalición de derecha capitaneada por Catello Maresca y que no logró obtener la alcaldía de la capital partenopea.

Maradona, a quien se conocía como “el Turquito”, no tenía la nacionalidad italiana aunque residía en el país regularmente después de haberse casado allí en 2016, en el municipio de Bacoli, donde contrajo matrimonio con Paola Morra y tuvo tres hijos: Nicole, Thiago y Melina.

Fuente: Muere Hugo, el hermano menor de Diego Armando Maradona | Gente | EL PAÍS (elpais.com)

Dos mil años de Panettone – de Anna Lanzani

Agua, harina, azúcar, manteca, huevos, fruta confitada y pasas de uva. Estos son los ingredientes del auténtico Panettone, desde siempre el símbolo de la Navidad milanesa. Su historia milenaria se recorre entre mitos, leyendas, increíbles documentos de archivo, viajes y perfumes que nos llevan a las fiestas romanas del Sol Invictus, a los barcos de los mercaderes genoveses y a los tugurios de la Lombardia en la Alta Edad Media.

Pero vayamos en orden y tomémonos nuestro tiempo tal cual ocurre con el verdadero Panettone, cuya levadura debe realizarse de manera natural y durante muchas horas.

Velada medieval. La Nochebuena de 1388 cayó un jueves y “en el cielo despejado se percibían estrellas, los niños jugaban. A la derecha de la puerta, un gran tronco de olivo esperaba cortado”: así describe esa velada Giovanni Manzini della Motta, un intelectual de la época, en una carta autógrafa en latín. Luego, con precisión de “instagrammer”, añade: “todos cantan; beben mucho. Visitan a los vecinos y siguen bebiendo de una vasija de madera oscura pero limpia”. Nos encontramos en Lunigiana, una franja de tierra en el norte de Italia, entre Liguria y Toscana, que aún hoy goza de una naturaleza salvaje. Della Motta es el invitado de una familia rural. El padre, según la tradición, toma el gran tronco de olivo y lo lleva a la chimenea ayudado por sus hijos mayores. Se reza para que el nuevo año sea prospero:  “no piden reinos, riquezas y bienes de lujo, anota della Motta sorprendido, sino corderos y lechones”.  Finalmente, todos se sientan a la mesa frente a un pan redondo, muy grande: un “panone”, se podría decir en italiano, o un “panettone”. El padre de familia se encarga de repartirlo. La primera rebanada junto con un pequeño vaso de vino se ofrece “al zocco”, es decir, al tronco de madera de olivo que está ardiendo. Luego se sigue repartiendo el pan entre los presentes y se guarda un último trozo para los pobres y los enfermos. Estamos, en pleno Medioevo cristiano, ante una ancestral ceremonia de ofrendas al fuego de origen celta o longobardo, atestiguada por fuentes antiguas y que sobrevivió durante miles de años. Es el “rito del zocco” y hasta hace pocos años en algunas campiñas lombardas se seguía celebrando.

El relato de della Motta es muy detallado: la mujer de la casa, “una morochita con la cara simple”, sirve lasañas de queso y nueces, manzanas dulces pasadas en las brasas y luego castañas “barrigudas” recogidas en los bosques de los alrededores. Se bebe hasta que todos se quedan dormidos, satisfechos, alrededor del fuego.

Es hurgando en archivos polvorientos a la búsqueda de documentos como estos, testimonios involuntarios y valiosísimos, que podemos imaginar la larga y estratificada historia de lo que hoy llamamos Panettone con la “P” mayúscula. Una historia poblada de mitos y leyendas tan mágicos cuanto improbables, tal cual ocurre con un buen cuento de Navidad.

Un cuento mediterráneo. La historia del que es el postre símbolo de Milán no es solo “nórdica” como podría parecer. Al contrario, se entrecruza con profundas tradiciones mediterráneas, romanas e incluso persas.

En la época imperial, los antiguos romanos celebraban en la fecha del solsticio de invierno, la noche más larga del año, la fiesta del “Sol Invictus” (sol invencible). A partir de ese día, la luz vuelve a ganar espacio frente a las tinieblas, devolviendo minutos de sol a las mañanas y a las noches.  En esa ocasión se regalaba a amigos y conocidos un pequeño pan redondo pintado con azafrán a base de miel, poca harina, frutos secos y semillas. Una suerte de “sol” comestible, que a final de año incluso hoy día se sigue haciendo y regalando en Roma con el nombre de Pan Giallo: un “tatarabuelo” de lo que ahora llamamos Panettone.

Para alcanzar la experiencia gastronómica fuente de tanto deleite del que es el dulce navideño más difundido en las mesas italianas falta sin embargo un aporte clave: el de los genoveses. Fueron los mercaderes de la rica ciudad marinera de Italia quienes a lo largo de sus recorridos en la fascinante Ruta de la Seda se encontraron con la uva sultanina:  una variedad pequeña, sin pepitas y con alto contenido en azúcar, ideal para su uso en repostería. Es la que ahora se conoce como uva pasa, cuya presencia es esencial en el Panettone.

Es siempre gracias a los andares de los navegadores genoveses que Europa descubre otro protagonista de los dulces de Navidad: la fruta confitada. Hace aproximadamente mil años, fueron los confiteros persas quienes desvelaron su arte secreta y compleja a los “speciarii” de Genova.

Precisamente con pasas de uva y esas deliciosas confitadas las familias genovesas solían enriquecer la masa dulce durante los días previos a la Navidad: un compuesto tan valioso que las amas de casa, durante la noche, lo llevaban bajo sus sábanas y acolchados para que el frío no interrumpiera la levitación. Probablemente inspirado en un postre persa relleno de frutos, aromas, confitados, pasas y piñones, partiendo desde Génova el Pan Dolce o Pan Doze en el idioma local,  logró conquistar el mundo: entre sus destacados directos descendientes figuran la “Genoa Cake” inglesa y el Pandulce argentino.  Mientras tanto, en Italia, unos 150 kilómetros más al este, el Panettone sigue su desarrollo.

Tres mitos renacentistas. Antiguo, simbólico, perfumado, leudado, el Panettone milanés se caracteriza por su forma (una bella y alta cúpula), una fermentación lenta y natural y muy pocos ingredientes. Esto mismo apunta a destacar la leyenda de Suor Ughetta, uno de los muchos cuentos de “origen mítico” de esta excelencia de la cocina italiana.

Eran las semanas más frías de la Navidad en Milán -así empieza el cuento- y en un pobre convento las hermanas se preparaban para celebrar el día más importante del año. Ughetta tuvo la idea de amasar un puñado de pasas y azúcar en una simple masa de pan. Antes de hornearlo, dibujó una cruz en la superficie. Una vez en el horno el pastel levó muy generosamente adquiriendo la forma de una cúpula y liberando preciosos aromas. Una historia que puede parecer algo sosa si no fuera que Ughetta, en el dialecto milanés, significa pasa de uva: por lo tanto, el nombre de la protagonista sería Hermana Pasa de Uva. Y no solo: los apasionados de pastelería se habrán dado cuenta que la cruz que la religiosa talla en el pan otra cosa no es que la “scarpatura”, como se dice en italiano, el importantísimo corte que se le hace a una masa para que pueda levar. Prueba de la sabiduría de los pasteleros lombardos, poco importa si reales o legendarios.

Otras leyendas surgidas en torno a la “creación mítica” del Panettone tienen como protagonista a un joven de nombre Toni, quien durante un banquete de la corte milanesa presentó un amasado de harina, azúcar y pasa de uva, un postre muy sencillo. El “pan de Toni”, precisamente. Pero como esta es una historia de nunca acabar, hay otra leyenda, igualmente antigua y tan fascinante que es digna de Hollywood: según esta versión, el Panettone estaría en el centro de una saga de amor, poder y azúcar.  La narración se desarrolla en Milán, en pleno Renacimiento. Ludovico el Moro, mecenas de grandes artistas, está al frente de un gobierno agresivo y pujante.  Leonardo da Vinci pinta la Ultima Cena. Es aquí donde empieza la leyenda. El hijo del noble general Giacometto Atellani se enamora perdidamente de una joven, hija de un humilde panadero: una relación sin dudas prohibida por un tema de clases sociales. Pero el joven no se da por vencido y, sin revelar su identidad, se lanza a la conquista de su princesa. Pide trabajo como mozo en la pobre panadería e inventa un postre que rápidamente se transforma en la última moda en la ciudad: el Panettone. Fama y fortuna llegan a la familia del humilde panadero gracias a este “startupper” de nobles principios, y los dos jóvenes se pueden casar y ser felices. La historia podría terminar aquí con el habitual “y vivieron felices para siempre”, pero es necesario aclarar un detalle: el nombre de Atellani era, nada menos, que Ughetto, es decir Señor Pasa de Uva.

Dulzuras en un College del siglo XVI. La historia de nuestro pastel favorito, lejos de terminar, recién empieza. Con cierta emoción lo volvemos a encontrar el “jueves 23 de diciembre de 1599” en el registro de los gastos del Almo Collegio Borromeo, en la antigua universidad de Pavia. Fundado en 1561, este prestigioso College aún funciona hoy y recibe cada año decenas de estudiantes de todo el mundo, seleccionados después de difíciles concursos. Los registros contables de los siglos pasados, todos perfectamente conservados, nos permiten enterarnos del menú de esa Navidad de finales del siglo XVI.  Escrito con una caligrafía minuciosa nos encontramos con un listado digno de Pantagruel: salchichas, trigo espelta para la sopa, carne de ternera, rúcula, huevos, capones, manzanas, castañas y peras cocidas. Capta nuestra atención, al principio de la página, un cuadrito especial, una receta nunca leída antes: “Manteca 3 libras, pasa de uva 2 libras, especias 5 onzas,  entregados al panadero del colegio para hacer 13 panes grandes para dar a los alumnos el día de Navidad” ¿Panes grandes, especiados, navideños? Es evidente que lo que se sirvió ese día fue nuestro amado Panettone. Y así es que pocos años después, en 1606, el término, hasta ese momento escrito en minúscula y como variación de la palabra “pane”, se va consolidando hasta quedar registrado como Paneton en el primer diccionario milanés-italiano.

Una estrella milenaria. A partir de ese momento la fortuna del gran pan de Navidad estalla y en los siglos XVIII y XIX hay decenas de testimonios de su popularidad en la gran capital del Norte de Italia. Durante la ocupación austriaca, el gobernador de Milán, Ficquelmont, solía ofrecerlo al príncipe Metternich como regalo personal.

Pero fue a principios del siglo XX cuando el Panettone conquistó el mundo gracias a las mejoras en las máquinas amasadoras y al florecimiento de la industria alimentaria italiana, hasta llegar a nuestros días. A pesar de su antigua historia, sigue siendo la estrella de la Navidad y se exporta a todo el mundo. Y no cansa: el segmento artesanal premium crece con fuerza y a pesar del elevado valor del producto las ventas aumentaron en el último año 150%.  El consumo, tradicionalmente limitado a los días de Navidad, ahora se extiende de octubre a enero y la propuesta convence no solo para almuerzo y cena sino también para el desayuno y la merienda. Una estrella que no para de brillar, en definitiva, y que apunta a otros dos mil años de historia.

Anna Lanzani (publicado por Perfil.com el 26/12/2021)

Fuente: Dos mil años de Panettone | Perfil

Los principales problemas de la justicia italiana – de Nicolás Fuster

A fines de noviembre tuvo lugar la Leopolda, un festival anual de tres días en la ciudad de Florencia, Italia. El evento, organizado por el ex Primer Ministro y actual líder de Italia Viva, Matteo Renzi, convoca a intelectuales, científicos, profesores, economistas, parlamentarios, exponentes de la sociedad civil. En la reciente y undécima edición, participó incluso un astronauta. Este artículo resume las principales ideas de los tres oradores del campo de la justicia.

Al presentar a los oradores, Renzi resumió las diferencias entre dos conceptos antagónicos. «El garantismo es al justicialismo lo que la democracia es a la dictadura. El garantismo es la justicia, el justicialismo es la negación de la misma. Ser garantistas no es estar de una parte; es estar con la Constitución. El expremier Conte equiparaba garantismo y justicialismo, pero no es que si dos palabras riman son lo mismo.»

El primero de los oradores fue el diputado Enrico Costa, del partido Azione, quien destacó la importancia de la nueva ley sobre la presunción de inocencia. Si bien se trata de un principio garantizado por el art. 27 de la Constitución italiana, la ley toca nuevos puntos. El primero de ellos es el fin de la gogna mediatica (concepto similar a “linchamiento mediático”). Así, Costa comenzó su exposición señalando la diferencia entre la justicia en los tribunales y fuera de ellos: «Hoy, las investigaciones son presentadas como películas: tenemos protagonistas, que son los fiscales. Tenemos el trailer, las imágenes que se proyectan. Tenemos un título, porque cada investigación tiene un nombre. Y la sentencia es ese momento, esa conferencia de prensa, ese titular que se difunde. Pero la verdadera sentencia llegará en años, cuando ya no le importe nada a nadie, cuando los reflectores del proceso se hayan apagado. La nueva ley trae un principio de civilización jurídica, le pone fin a este fenómeno. Le agradezco a Italia Viva por haber apoyado esta idea en el Parlamento.»

En esta línea, Costa indicó que «La tarea del estado es garantizar que el ciudadano que debe responder en un proceso penal y es declarado inocente, sea la misma persona que era antes en términos de imagen, reputación, crédito social. Hoy en nuestro país esto no ocurre, porque esa conferencia de prensa o ese titular te marca de por vida, aunque te absuelvan.»

El diputado nombró otros puntos importantes de la ley de presunción de inocencia: «Luego de la absolución, el estado debe devolver a la misma persona. Con esta ley conseguimos dos cosas: el derecho al olvido para los absueltos, es decir que ellos tienen derecho a obtener de Google, etc. la desindexación de sus nombres respecto a los artículos y las investigaciones, que afecta en especial a las personas más humildes, que van a buscar trabajo, quizás se las busca online y aparece el proceso pero no aparece que fueron absueltas. El segundo punto se refiere a los gastos legales de los absueltos. El estado te pide que respondas, te absuelve pero tenías que pagarte los gastos. Ahora, este principio de civilidad es ley.»

Por último, Costa se refirió a la reforma de la justicia que impulsa el Gobierno de Mario Draghi: «Cada año, más de 100 mil personas son absueltas en primer grado. ¿Con qué ligereza son mandadas a juicio? Una gran novedad de la llamada reforma Cartabia (por el apellido de la Ministra de Justicia, que la promueve) es que les pide a los jueces mandar a juicio solo si hay una razonable probabilidad de condena. Con esto será posible medir la capacidad de prognosis: tenemos miles de personas al año resarcidas por detenciones injustas. Y quienes los arrestaron hacen carrera, porque estos actos no terminan en los escritorios de quienes deben ejercer la acción disciplinar, no obstante las evaluaciones positivas del Consejo Superior de la Magistratura.»

El segundo orador, Gian Domenico Caiazza, Presidente de la Unión de Cámaras Penales Italianas, comenzó remarcando la importancia de tener a Marta Cartabia en el Ministerio de Justicia, aunque señaló una demora grave en la nueva reforma: la de re–equilibrar los poderes del estado entre sí. Según Caiazza, desde hace 25 años en Italia el poder judicial excede sus propios límites constitucionales, porque condiciona y determina el resultado y la vida política, el ejercicio del poder, solo con una inscripción en el registro de las noticias de delito. «Necesitamos una reforma radical del ordenamiento judicial, pero también trabajar sobre la responsabilidad profesional del juez, que debe responder por lo que hace, por qué hace saltar una asamblea regional, por qué hace renunciar a un ministro, por qué condiciona un gobierno sin una razón que lo justifique, por qué la investigación termina en la nada. Un poder tan extraordinario, ejercitado de manera irresponsable, desequilibra la democracia y la vida política de un país.»

Para resolver este desequilibrio, Caiazza propone «intervenir en los criterios de juicio de profesionalidad, que hoy son una caricatura. Debemos retomar el recorrido hacia los valores liberales del derecho penal, donde el derecho penal no es un instrumento de represión o condicionamiento, sino un conjunto de reglas para limitar y gobernar la potestad punitiva del estado. Entre el poder punitivo del estado y el ciudadano, la atención de los liberales debe estar en los derechos de libertad de la persona que enfrenta al poder judicial. Debemos responder sobre lo que hacemos y que interviene sobre la libertad y dignidad.»

El tercer expositor fue Sabino Cassese, Juez emérito de la Corte Constitucional, quien sintetizó el estado de la justicia italiana en cinco puntos. El primero de ellos, la preocupante situación italiana, se debe a un atraso de 6 millones de procedimientos. Esta creciente demanda de justicia no satisfecha hace que la confianza de la población italiana en los últimos 10 años esté casi en la mitad. La falta de sintonía entre el orden judicial y el país es, según Cassese, el primer dato para entender la situación de crisis.

En segundo lugar, la Constitución italiana preveía un escudo para evitar la politización de la justicia, en defensa de la independencia de los jueces. Pero esta independencia se convirtió en autogobierno, de a poco se constituyó una especie de estado dentro del estado. Un ejemplo que ilustra este fenómeno es el CSM (Consejo Superior de la Magistratura), que no da datos de sus propios empleados al Ministerio de Economía, porque no se considera parte del estado.

Tercero: la Constitución separa los poderes, pero una parte de los jueces cubre las posiciones más importantes del Ministerio de Justicia — el único Ministerio citado por la Constitución, que dice que esa cartera se interesa del funcionamiento de los servicios relativos a la justicia. Pero los jueces también participan en la formación legislativa, por ejemplo con funciones de jefes en los oficinas legislativas de los ministerios. Los constituyentes se preocuparon por evitar una politización desde afuera, pero ahora hay una politización endógena, dentro de la misma magistratura. Por ende los poderes, en lugar de separados, se concentran dentro del orden judicial. El cuarto aspecto: el art. 111 de la Constitución dispone que el acusado sea informado reservadamente de las acusas. Pero la acusación se hace en público, se convierte en un juicio y ocurre lo que en EEUU llaman naming and shaming, “señalar con el dedo para el escarnio público”, con sus consecuencias.

El último punto es que una vez se decía que los jueces hablan a través de las sentencias. Pero los jueces ahora están en el espacio público y destruyen la imagen de la imparcialidad que debe haber en la opinión pública. Como resultado, el presidente de uno de los mayores tribunales italianos dijo “cada año tenemos al menos 150 mil indagados luego imputados, que esperan al menos 4 años para ser absueltos en primer grado. Un millón y medio cada 10 años. Con esta tendencia mandamos a proceso en 50 años más de 7 millones que serán absueltos en primer grado.” Es un cuadro sintético del estado de la justicia en Italia, y por esto necesitamos remedios importantes para salir de una situación en la que no hay consonancia entre el país y la justicia.

La justicia en Italia enfrenta diversos desafíos. Si bien con la reforma Cartabia el gobierno de Mario Draghi comenzó el camino para dar una respuesta garantista, quedan dos puntos fundamentales y políticos: la reforma del CSM y conseguir que los próximos gobiernos continúen en esta dirección.

Nicolás Fuster

Fuente: Los principales problemas de la justicia italiana | by Nicolás Fuster | Dec, 2021 | Medium

Más de un kilo de muzzarella y todo a ojo: los secretos de la fugazzeta más aclamada de Buenos Aires

No hay un solo lugar para sentarse, cierran los domingos y el delivery empezó recién con la pandemia. En La Mezzetta no precisan marketing digital: la gente llega sola, por el boca en boca y en busca de la fugazzeta más aclamada de la ciudad. Una vez dentro del pequeño salón, los clientes se acomodan como pueden con sus porciones de pizza y moscato en las pequeñas barritas contra la pared. O incluso, si no hay lugar, en la misma vereda.

Ese ritual comienza recién al mediodía. Pero a las 9 de la mañana de un día laborable la persiana del discreto local de la Av. Álvarez Thomas al 1300, en el barrio porteño de Villa Ortúzar, solo se abre para recibir el pedido de muzzarela, que llega en bolsas de 25 kilos. Por dentro, todo es movimiento frenético.

En la cocina, y al calor del horno, tres empleados estiran decenas de bollos en pizzeras. Lo hacen colocándoles un poco de harina 0000 por encima y a máxima velocidad: en cuestión de minutos la pila de pizzeras se hace gigantesca.

“Ahora hay pocas, ahí debe haber unas 100”, dice señalando con las cejas Antonio Romero, un hombre de bíceps marcados y pocas palabras. Hace dos horas —y al igual que cada día desde hace 30 años— amasó la masa original de la que salieron los cientos de bollos que ahora levan en la torre de asaderas. La hizo en un enorme cajón de madera en el que pone bolsas de 50 kilos de harina con su respectiva proporción de levadura fresca, agua y sal. A puro bíceps, porque en la Mezzetta se hace todo a mano.

Él tarda 8 minutos por tanda: amasa unos 100 kilos de harina por la mañana y una pequeña tanda de refuerzo de 25 kilos por la tarde. Una vez que leva, pone la masa en la mesada y corta porciones con sus manos. No se pesa nada: a esta altura podría hacerlo con los ojos vendados. A medida que separa los bollos, los va arrojando por el aire a las pizzeras que le acercan los demás empleados. Entre tandas de asaderas, toma mate. De fondo se escucha folclore. El dial, como tantas otras cosas aquí, no se negocia.

En la barra del salón principal —un pequeño reducto de desgraciados azulejos beige— ya comenzó la producción de empanadas: hacen unas 1300 diarias. Nada de extravagancias, hay solo dos sabores. Las clásicas de carne, que existen desde que existe la Mezzetta, y las de jamón y queso, una incorporación reciente. “Esas se hacen hace poco tiempo, tendrán 20 años”, estima Eduardo Romero, que hace 39 trabaja en el local. Cada día se levanta a las 4.40 y recorre 10 kilómetros en bicicleta desde Ciudadela para poder abrir el negocio a las 6.30. No le parece tan sacrificado: en otra época entraba a las 3.

Hasta donde pudo recopilar la actual gerencia, La Mezzetta existe en Álvarez Thomas y Forest desde 1939. “Desde ese momento al menos tenemos papeles”, dice Luis Dovale, que está hace 28 años al frente del local. Pero un viejo portero del edificio del Hogar Obrero —una vivienda colectiva inaugurada en 1932 que queda justo enfrente de La Mezzeta— le contó que recordaba perfectamente haber comido pizza en su restaurante en 1935.

Hoy siguen yendo a la pizzería viejos clientes que la conocen desde que el cercano boliche New York City era el cine El Atlántico. Antes iban por porciones entre funciones de películas; hoy llevan contentos a sus nietos. Los posteriores clientes de la matiné de New York City podían ser un poco más “pesados”: los empleados recuerdan noches en las que tal vez alguien prendía fuego en un tacho de basura y todos comenzaban a bailar a su alrededor.

El suegro de Dovale, junto a tres socios, ”dos gallegos y un asturiano”, entraron al negocio en 1957. Entonces el local era de 4×8, Álvarez Thomas estaba empedrada y pasaban los trolebuses por la puerta.

Cuando Dovale empezó a trabajar en el local, en 1998, apenas se vendían unas 20 fugazzetas por día. Hoy por hoy son el hit de ventas.

¿Cuál es su secreto? Uno de ellos es la cantidad de muzzarella: cada una lleva entre un kilo y un kilo y medio de queso. La variabilidad es porque no se usan balanzas: “todo se hace a ojo y a mano”, dice Dovale, que detalla que la pizza ha llegado a tener hasta dos kilos de muzarella.”Pero era demasiado”, se ríe.

Hoy por hoy, en total, usan entre 200 y 250 kg de muzzarella por día.

Kilos y kilos de cebolla

Una rareza total: todas las pizzas del restaurante se ponen dos veces en el horno “para que se cocinen bien parejas”. La cocción de la primera prepizza es “normal”. Pero la segunda, que se hace justo antes de que se venda, se pone en el horno con el queso hacia abajo. Así se aseguran de que quede perfectamente cocida una pizza de molde, muy alta.

A las 10.30 se empiezan a cocinar las prepizzas: completamente armadas, van al horno para una primera cocción veloz. En el caso de la fugazzeta, que es rellena, eso incluye el queso que va por dentro y las cebollas que van por fuera. Como resultado, salen bien quemaditas.

Francisco Ibáñez coloca cebollas en una enorme picadora, casi el único artefacto que se permite en un lugar donde todo se hace a mano. Los volúmenes lo justifican: ahí sacan tandas de a 100 kilos. Alguna vez también compraron una peladora, que descansa olvidada en un depósito porque tardaba casi lo mismo que hacerlo manualmente. “Acá nadie tiene un puesto fijo y todos hacemos de todo”, dice Ibáñez, que deja funcionando la máquina mientras saca fugazzetas y fainás del horno.

Él es el veterano: trabaja en La Mezzeta hace 59 años. Entró como lavacopas, en el turno noche, cuando tenía 25. Cuando lo pasaron al turno mañana y comenzó a cocinar lamentó un poco su suerte, se había encariñado con la bohemia nocturna. Francisco se levanta a las 5 de la mañana para llegar desde Olivos y admite feliz que aún no se cansó: come pizza prácticamente todos los días de su vida.

La cebolla primero se deja un rato en sal para que largue un poco su jugo y se exprime con las manos antes de colocarse sobre la tapa de arriba de la fugazzeta. Los condimentos se ponen apenas sale del horno con su segunda horneada: un chimichurri casero hecho con orégano, ají molido, laurel, aceite y sal. Las hojas de laurel las aporta Dovale, que tiene un árbol en su casa.

Cuando hace muchos años decidieron no abrir más los domingos —fabricar todo de cero cada día supone seis horas de trabajo frenético a la mañana— comenzaron a vender prepizzas al público. Los fanáticos se entusiasmaron: desde entonces pueden stockearse cuando la Mezzetta cierra cada enero por vacaciones.

La pandemia impuso algunos cambios que tal vez permanezcan en el local. Si antes no era infrecuente que el salón tuviera 40 personas adentro entre comensales y una fila serpenteante de hambrientos que esperaban su porción para llevar, hoy solo se puede entrar de a ocho personas a la vez. Tal vez la fila se siga formando afuera de ahora en adelante. El delivery llegó por primera vez en su historia pero sigue siendo marginal, no representa más del 20% de las ventas. Es autogestionado porque no se sintieron cómodos con las modernas aplicaciones. Y ya no se ven las enormes filas de taxis que indicaban más que el propio cartel que ahí está la Mezzetta. Lo cierto es que sigue estando y aseguran que hay fugazzeta para rato.

Maria Ayzaguer (publicado por La Nación el 24/12/2021)

Fuente: Más de un kilo de muzzarella y todo a ojo: los secretos de la fugazzeta más aclamada de Buenos Aires – LA NACION

The Economist mombró a Italia “país del año”

La prestigiosa revista The Economist lo entrega todos los años. Anteriores ganadores del premio han sido Uzbekistán, por haber abolido la esclavitud; Colombia, por lograr avances en la paz con el narcotráfico; y Túnez, por adoptar un sistema democrático. Este año, según cuenta el semanario, le fue más complicado encontrar un claro ganador. Esto se debió a la miseria esparcida por el Covid-19 en conjunto con la desigual distribución de vacunas en el mundo que permitió la formación de nuevas variantes, a que en muchos países se erosionaron las libertades civiles y los derechos democráticos y a guerras civiles como las de Etiopía y Birmania. Sin embargo, en medio de tanta oscuridad hubo algunos focos de luz.

En un artículo publicado hoy en su versión digitalThe Economist explicó cómo llegó a la conclusión de cuál debía ser el elegido de este 2021. Antes de anunciar el ganador, los editores enumeraron los otros países en los que pensaron: Samoa, Modavia, Zambia y Lituania.

En Samoa, por ejemplo, la Corte del país logró desarticular una crisis constitucional y echó del poder al partido que gobernaba hace 33 años con un primer ministro que afirmaba haber sido elegido por Dios, e instaló en su lugar a una reformista y primera mujer en ejercer el cargo. Moldavia, uno de los países más pobres de Europa que ha sido por mucho tiempo el destino de operaciones de lavado de dinero ruso, eligió a fines de 2020 a Maia Sandu como presidenta. Esta orientó su campaña alrededor de la lucha contra la corrupción y en 2021 su partido logró el control del parlamento.

Zambia, por su parte, logró recuperar su democracia. En agosto del año pasado el partido que ejercía el poder intentó robarse la elección, pero los ciudadanos votaron por Hakainde Hichilema por un margen tan amplio que el fraude no logró revertir el resultado. Hichilema, un liberal del mundo empresarial, llegó a un acuerdo con el FMI y prometió recortar los subsidios antieconómicos a la electricidad y el combustible y ha comenzado a investigar la corrupción estatal.

Otro de los grandes candidatos a ganar el premio fue Lituania, que también sostuvo con con firmeza los valores democráticos y se enfrentó nada menos que al régimen chino al permitir que Taiwán abriera una oficina de representación en su capital Vilnius. También aconsejó a sus ciudadanos a que se deshicieran de sus teléfonos producidos en el gigante asiático luego de enterarse que contaban con un “software de censura” que se podía activar sin previo aviso. También se enfrentó a otros regímenes autoritarios, como cuando le dio asilo a exiliados de Bielorrusia Rusia, incluida a la mujer que probablemente haya ganado la última elección bielorrusa Svetlana Tikhanovskaya. Como represalia, el candidato que se robó dicha elección, Alexander Lukashenko, buscó vengarse haciendo que las multitudes que se encontraban en la frontera avanzaran hacia el país. Si bien la reacción de Lituania obtuvo algunas críticas, fue mucho más humana que la de Polonia -a quien Bielorrusia provocó de la misma forma.

Pero el ganador del premio fue Italia. “No por sus logros deportivos o musicales”, señala The Economist, haciendo referencia a los triunfos de la selección masculina de fútbol en la Eurocopa o a sus artistas que ganaron el concurso de canciones de Eurovisión. La revista se basa en su contexto político. Debido a un mal manejo en el gobierno, los italianos eran más pobres en 2019 que en 2000. “Sin embargo, este año, Italia cambió”. En la elección de Mario Draghi como primer ministro encontró a una figura competente e internacionalmente respetada. “The Economist ha criticado a menudo a Italia por elegir líderes, como Silvio Berlusconi, que podrían haber seguido útilmente la advertencia de la canción ganadora de Eurovisión de ‘callarse y comportarse’. Debido a la debilidad de la gobernanza, los italianos eran más pobres en 2019 que en 2000”, dice la nota.

Fuente: The Economist eligió al “país del año” – Infobae

Italia busca argentinos para trabajar: cuáles son los requisitos y cuál es el sueldo mensual

La Universidad Nacional de Rosario firmó un acuerdo con la comuna Mussomeli de Italia con el objetivo de abrir una convocatoria entre graduados en medicina de la universidad santafesina.
El objetivo del documento es atraer a 2.251 médicos, de los cuales 23 van a ser asignados a la comuna Mussomeli y el resto a toda la región siciliana.
“Tenemos que cubrir muchos puestos. Comenzarán ganando un salario base de 6.000 euros a los que luego se sumarán premios, horas extras y pago por especialidad”, anunció Erica Moscatello, embajadora de CONFAPI Sicilia (Confederazione italiana della piccola e media industria privata).
La región necesita anestesiólogos, ginecólogos, clínicos, cirujanos, psiquiatras y odontólogos, entre otras especialidades. “Algunos profesionales llegarán a ganar cerca de €10.000 por mes, según la especialidad y experiencia”, sumó Moscatello.
De esta manera, la UNR estará a cargo de la convocatoria que se lanzará en febrero y de la que solo podrán participar graduados de esta institución.
Cabe mencionar que la convocatoria no establece mínimo ni máximo de edad y abarca todas las especialidades médicas posibles. Incluso pueden ser profesionales recién egresados o médicos con experiencia.
Una vez que se homologuen los títulos de los profesionales, los médicos argentinos interesados podrán viajar a Italia. Para ello deberán pagar el pasaje con sus propios recursos, pero al llegar tendrán un contrato laboral y una ayuda para realizar los trámites y encontrar un lugar dónde vivir.
Además, la comuna italiana contrató un equipo técnico que se encargará de la homologación de los títulos de cada médico.
Esta particular convocatoria no exige que los médicos tengan la ciudadanía porque entran a Italia con el permiso de residencia por contrato laboral. Tampoco se les exige que sepan hablar italiano ya que tendrán a su disposición un profesor que les enseñará el idioma cuando lleguen.
El principal objetivo de la convocatoria es cubrir la carencia de médicos que tiene Italia. “Varios consultorios debieron cerrar momentáneamente por la falta de médicos. Con este acuerdo queremos no solo cubrir esta demanda sino que los profesionales se queden a vivir acá”, expresó Moscatello.

Italia clasificó como segura a Argentina

En el día de ayer el Gobierno italiano emitió un comunicado en el cual movió a la Argentina y a otros países de la lista “E” a la lista “D” en su categorización de impacto de la pandemia. Pero, ¿Qué quiere decir esto? ¿En qué afecta a los viajeros argentinos que quieran viajar a la “bota” de Europa?

El cambio de categoría implica que ahora los argentinos podrán ir a Italia siempre y cuando puedan presentar un certificado con el esquema de vacunación completo de alguno de los inoculantes contra el Covid-19 aprobados por la Agencia Europea de Medicamentos (EMA, por sus siglas en inglés), es decir que tanto la vacuna Sputnik-V y la Sinopharm no están contempladas entre ellas, entre las cuales sí se encuentran las vacunas de Pfizer, Moderna, Astrazeneca y Jhonson & Jhonson.

Además los viajeros que quieran ingresar a Italia deberán completar un formulario de localización del pasajero, en el cual se le pedirán datos de su estadía en Italia, y presentar un test PCR de resultado negativo o un test de antígenos del mismo resultado hecho dentro de las 72 horas previas al embarque.

Quienes no puedan certificar su esquema de vacunación completo o estén vacunados con algún inoculante no reconocido por Italia, también pueden ingresar al país europeo pero deberán:

– Completar el formulario de localización de pasajeros

– Presentar una prueba de antígenos o PCR de resultado negativo hecha dentro de las 72 horas previas al viaje

– Notificar la entrada a Italia al Departamento de Prevención de la autoridad sanitaria local

– Viajar hasta el destino final únicamente en transporte privado, realizar en dicho destino una cuarentena de 5 días

– Por último realizar un segundo testeo PCR o de antígenos al finalizar el “auto-aislamiento”.

Es importante aclarar que en los sitios oficiales gubernamentales de Italia, la lista “D” aún no está actualizada, pero este medio confirmó con la Embajada italiana en Buenos Aires que la resolución fue emitida y que los sitios web están en proceso de actualización.

¿Qué pasa en el resto de Europa?

Cómo ya informó este medio, tanto España como Alemania también flexibilizaron sus restricciones para los viajeros provenientes de Argentina a comienzos de noviembre.

Por aquel entonces, fuentes de la embajada de Alemania en Buenos Aires confirmaron a este medio que los viajeros argentinos y residentes de Argentina pueden viajar hacia el país germano sin la necesidad de contar con el esquema de vacunación completo. Únicamente presentando el test PCR de resultado negativo hecho 72 horas previas al embarque es suficiente para poder ingresar.

Similar es el caso de España, los argentinos que vayan hacia el país ibérico deberán únicamente completar el “Formulario de Control Sanitario” y con él obtener un código QR que deberá ser presentado en el embarque y en los controles sanitarios aeroportuarios al arribo. No es necesario cumplir con otros requisitos tales como una cuarentena o presentar test de resultados negativos.

Diferente es el caso de Francia. Este fue el primer país de Europa central en permitir el ingreso de los turistas argentinos sin solicitar un testeo PCR previo al embarque en caso de estar vacunado con alguna de las vacunas aprobadas, entre las cuales no se encuentra la Sputnik-V, o solicitando el testeo para los viajeros no vacunados o con inoculantes no aprobados.

Sin embargo, a comienzos de diciembre y a causa del incremento de la circulación de la variante Ómicron, reforzaron sus protocolos de salud para viajeros internacionales, y ahora toda persona que ingrese a Francia desde fuera de la Unión Europea debe certificar un test PCR o de antígenos negativo hecho dentro de las 48 horas previas el viaje, sin excepción.

Tomás Peiró (publicado por Infobae.com el 15/12/2021)

Fuente: Italia clasificó como segura a la Argentina: qué significa para los turistas y cómo es la situación en el resto de Europa – Infobae

Nuevas disposiciones de ingreso en Italia desde Argentina

El día 16 de diciembre en su sitio web el Consulado General de Italia en Buenos Aires informó la nueva normativa sobre los viajes entre Italia y Argentina. Se trata de información actualizada al 15 de diciembre puntualmente sobre el ingreso a Italia desde Argentina según disposiciones vigentes desde el 16 de diciembre 2021 al 31 de enero de 2022.

Allí se comunica que a partir del 16 de diciembre, con la Disposición del Ministro de Salud del 14 de diciembre, Argentina ha ingresado en la lista de los Países incluidos en el listado D del adjunto 20 al decreto del Presidente del Consejo de Ministros del 2 de marzo de 2021.

El ingreso en el territorio nacional está permitido a las personas que hayan permanecido o transitado, los catorce días precedentes, en uno o más Países o territorios del listado D independientemente de los motivos del viaje (sin necesidad de presentar en el momento del embarque, a las autoridades que estén encargadas de efectuar controles, la nota consular y la relativa documentación justificativa del viaje) y bajo las siguientes condiciones:

1. Completar un formulario on-line de localización (denominado también digital Passenger Locator Form (dPLF) y presentarlo, en el celular o impreso, a la compañía en el embarque, y a las autoridades que efectúen controles;

2. Presentar a la compañía, en el embarque, y a las autoridades que efectúen controles, la certificación “verde” COVID-19, que certifique el ciclo completo de vacunación o certificación equivalente, emitida por las autoridades sanitarias competentes después de haberse vacunado con vacunas validadas por EMA (la Agencia Europea de medicamentos);

3. Presentar a la compañía, en el embarque, y a las autoridades que efectúen controles, un certificado que certifique el resultado negativo de un PCR o de un test de antígenos, a través de hisopado, efectuado dentro de las 72 hs. precedentes a la llegada a Italia si es PCR o dentro de las 24 hs. precedentes al ingreso en el territorio italiano si es de antígenos.

En caso de no poseer la certificación del punto 2 (certificado de vacunación) es posible de todas formas ingresar a Italia, pero es obligatorio:

– Realizar test PCR o de antígenos (72 horas en el primer caso; 24 horas en el segundo);

– Realizar aislamiento por cinco días informando la ASL competente para activar los controles de la misma, en el domicilio informado en el formulario. Se deberá llegar al mismo con medios privados.

– Efectuar un nuevo PCR o test de antígenos, a través de hisopado, al finalizar los 5 días de aislamiento.

Desde el 23 de septiembre el Ministerio de Salud italiano ha reconocido la equivalencia de algunas vacunas, suministradas en el exterior, a aquéllas efectuadas en Italia según el Plan nacional de vacunación para la prevención del SARS-CoV-2.

Se trata, especificamente, de:

– Vacunas reconocidas por EMA – Agencia Europea de los Medicamentos (ver Adjunto n. 1 de la Circular);

– Covishield (Serum Institute of India), producida con licenza de AstraZeneca;

– R-CoVI (R-Pharm), producida con licencia de AstraZeneca;

– Covid-19 vaccine-recombinant (Fiocruz), producida con licencia de AstraZeneca.

Como consecuencia de este reconocimiento:

– Los ciudadanos italianos (también residentes en el exterior) y sus familiares convivientes, independientemente si están o no inscriptos en el Servicio Sanitario Nacional o al SASN (Asistencia Sanitaria para el Personal Navegante), y todos aquellos inscriptos bajo cualquier categoría en el Servicio Sanitario Nacional que estén vacunados en el exterior con las vacunas antes mencionadas o que hayan cursado la enfermedad COVID-19, podrán solicitar, cuando se encuentren en territorio italiano, la emisión del Green Pass, concurriendo a las ASL (Agencias Sanitarias) competentes por domicilio.

– Todos los demás ciudadanos extranjeros vacunados en el exterior con las vacunas antes mencionadas tendrán el derecho de admisión, en el territorio nacional, a todos los lugares y servicios para los cuales se exija presentación de Green Pass.

– Para poder ser reconocidas como equivalentes al Green Pass, las certificaciones sobre las vacunas aplicadas en el exterior deberán contener las siguientes informaciones: datos identificativos del titular, datos de la vacuna, fechas de suministro, datos del emisor del certificado; deberán además estar redactadas en italiano, inglés, francés, español o alemán o, si estuviesen en otro idioma, estar acompañadas por traducción pública.

Fuente: NUEVAS DISPOSICIONES DE INGRESO EN ITALIA DESDE ARGENTINA (wixsite.com)

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