Dos parlamentarios electos en 2018 por los italianos que residen en el área del Consulado de Buenos Aires, en Argentina, son investigados por la Fiscalía de Roma por supuestos “fraudes electorales”: Habrían obtenido su escaño gracias a unas 20 mil boletas electorales falsificadas. Los votos “se habrían emitido con una caligrafía idéntica y probablemente con la misma lapicera”. La alarma de los fraudes en los escaños argentinos se había ya lanzada en 2012, cuando la Fiscalía de Roma había investigado un caso similar en las elecciones de 2008. Hoy los sospechados son el diputado Eugenio Sangregorio y el senador Adriano Cario, ambos residentes en Argentina. Ambos fueron candidatos por la Unión Sudamericana de Emigrantes Italianos (USEI), un partido que pertenece al grupo mixto con posiciones cercanas a la centro derecha, quienes no respondieron cuando intentamos contactarlos. Cario no contestó el correo electrónico y el abogado Vincenzo Carrozzino, secretario del USEI no respondió por Sangregorio.
La Junta de las Elecciones y la Inmunidad Parlamentaria del Senado, el órgano parlamentario que interviene cuando las elecciones están cuestionadas, podría votar pronto para hacer decaer al senador Adriano Cario. La Junta electoral de la Cámara no emitio nada aun sobre el diputado Eugenio Sangregorio porque todavia no fue presentado el ricorso que podria hacerse en las proximos dias. El procedimiento contra los dos parlamentarios de la USEI fue impulsado por dos candidatos del Partido Democrático que quedaron fuera del Parlamento, Fabio Porta y Alberto Becchi, quienes informaron de los presuntos fraudes.
En el caso que la Junta del Senado considere valido el informe de los querellantes, Fabio Porta tomaría automáticamente el lugar de Cario. La situación esta mas complicada en la Cámara, por la cual Alberto Becchi se postulaba , en este caso, la comprobacion de los ilicitos cuestionaría la asignación de los cuatro asientos parlamentarios de los italianos en América del Sur.
Los tiempos se han estirado por una serie de apelaciones y contra apelaciones entre Fabio Porta y el Tribunal de Apelación de Roma, mientras que el proceso se desaceleró por la pandemia de COVID-19.
También para las elecciones de 2008 hubo contestaciones similares, pero el procedimiento finalmente fue archivado. Este supuesto sistema de falsificación electoral, parece repetirse a lo largo de los años, cuestionando continuamente el escrutinio electoral de los italianos en Argentina.
Mientras tanto, en Italia, en la ciudad y provincia de Cosenza, donde se encuentra la sede del USEI, la fiscalía realiza una investigación en la que, aunque no indagados, son mencionados algunos hombres claves del movimiento político.
Las irregularidades consistirian en trabajos realizados en el hotel de la familia Sangregorio asignado y llevado a cabo de manera irregular. La investigación va más allá: se especula en la existencia de un verdadero sistema para asignar ilegalmente obras públicas en los municipios de la costa de Cosenza.
El voto de los italianos en el extranjero es más vulnerable a los posibles fraudes por la forma en que se expresa. Los ciudadanos italianos reciben sobres electorales por correo, y expresan su voto por correspondencia. Las boletas electorales deben enviarse a los consulados más cercanos y desde allí a Italia. En Argentina, el envío de los sobres electorales, en las elecciones de 2018, fue realizado por el Correo Argentino, el Servicio Postal Estatal.
¿Cómo empezó el caso Cario – Sangregorio?
En 2018, los candidatos perdedores del Partido Democrático Fabio Porta y Alberto Becchi presentaron dos denuncias, una en Italia, en el Tribunal de Apelaciones de Roma, a cargo de las investigaciones relacionadas con la jurisdicción “estero”, y una en Argentina – en el Tribunal Federal de Mar del Plata. En la Cámara y en el Senado, la elección se ganó con una diferencia de alrededor de 10 mil boletas electorales y en el conjunto mas de 20 mil, los votos obtenidos en la capital argentina representan el 47% del total de los votos logrados por la USEI, según los cálculos de Porta y Becchi.
Desde un principio, los escrutadores del PD y de otros partidos, como el MAIE, encontraron posibles irregularidades en las boletas, escriben en la denuncia los dos candidatos.
El Fraude electoral
En el Senado, el candidato excluido Fabio Porta identificó 32 secciones “en riesgo de fraude”, que expresaron 22.633 votos a favor de la USEI. En dos de ellas, en la ciudad de Buenos Aires, USEI obtuvo el 96% de los votos, frente a un promedio del 23% en el resto de la capital. De las aproximadamente 22.000 preferencias obtenidas por el senador Cario en toda Sudamérica, 16.860 se obtuvieron en 14 de los 99 asientos pertenecientes al consulado de Buenos Aires, cuya extensión es muy amplia. En definitiva, los votos que enviaron a Cario y Sangregorio al gobierno se recogieron principalmente en el distrito de Buenos Aires.
Adriano Cario, señala Fabio Porta, ni siquiera era el uno de la lista de USEI para el Senado en la repartición sudamericana, otro elemento que ensombrecería su resultado, según el demandante. Discurso similar para la situación en la Cámara. En la denuncia presentada por Alberto Becchi en Argentina leemos que en 33 colegios electorales el diputado Eugenio Sangregorio obtuvo 15.861 preferencias de las 16.478 del total. “El candidato a la Cámara de Diputados de USEI obtuvo 38 mil votos en todo el Sur América- reasume Alberto Becchi, candidato por el PD. – En solo unos pocos colegios electorales de Buenos Aires obtuvo 24.000 votos. En los otros 500 colegios electorales, 14 mil votos».
Las pericias caligráficas
En la denuncia presentada en Roma, los querellantes informan también que, durante el escrutinio en las secciones infractoras, los escrutadores del Partido Democrático notaron que los votos para los dos candidatos de la USEI fueron “expresados con idéntica caligrafía y probablemente con la misma lapicera”. Esta indicación fue examinada por los peritos de la Fiscalía de Roma, tras la apertura de la investigación. El candidato Porta las remitió al Consejo Electoral del Senado ya en abril.
De lo que se lee en el informe de la última reunión de la Junta del Senado, los peritos de la fiscalía identifican diferentes grupos de boletas que fueron votadas por las mismas personas, como lo indica la grafía: diez manos votaron varias veces en una de las secciones analizados. y cinco en la otra. Dos autores serían los mismos. Según declaró Porta a la Junta, contando nuevamente se llegaría a más de 12mil votos menos para Cario. Si esto fuera confirmado, Porta se volvería senador y Cario caería. Las conclusiones de las pericias de la fiscalía valdrian también por los escaños disputados por la elección de Sangregorio.
¿Cómo fue posible llenar miles de boletas de esta manera? Según las presunciones de los candidatos perdedores, parte de estas boletas nunca se habrían entregado a los electores, sino que habrian sido detenidas en un deposito del Correo Argentino. Aquí es donde los parlamentarios temen que se haya producido la falsificación de votos una circunstancia que conviene investigar sobre el terreno, en Argentina. Porta y Becchi han preparado una denuncia para el fuero penal para que se investige si la USEI ha sido participe en una verdadera asociación delictiva con al menos nueve personas cuyo propósito era “modificar el resultado de las elecciones”.
Cecilia Agnesi & Lorenzo Bagnoli (pubblicato da Irpimedia.eu lo 08/09/2021)
Fuente: Elezioni italiane 2018, sotto indagine per presunti brogli il voto in Argentina (irpi.eu)